Debe tener en cuenta que es lo que quiere realmente. ¿Meramente aprender? ¿Qué el póquer sea un pasatiempo? ¿Divertirse? ¿Ganar dinero?
Piénselo bien, depende de sus expectativas los resultados finales variarán. No espere que si juega como un pasatiempo, para pasar un rato el domingo o simplemente para divertirse, se convierta en un ganador.
Tenga en cuenta que se verá envuelto en situaciones favorables, donde ganará mucho dinero o desplumará a un rival debido a una gran decisión, pero también piense que usted puede ser el desplumado. Es la grandeza de este juego. Ganar un gran bote con un farol y sentirse satisfecho de su agudeza o perder contra una mano a priori inferior todas sus fichas y sentirse como un patán.
Aunque aprenderá que esto es un juego más bien de habilidad, debe saber que la suerte influye, que una probabilidad muy favorable para usted, se puede transformar en segundos en la pérdida de un torneo o de un gran bote. Por ello, debe estar preparado para lo mejor, pero también para lo peor. Deberá tener paciencia y esperar ganar a largo plazo.
“Nadie es siempre un ganador, y si alguien dice lo contrario, o es un mentiroso o no juega al póquer.” -Amarillo Slim, leyenda del póquer.
Si de verdad quiere ganar dinero, siéntase en la mesa simplemente para eso, para ganar dinero. Recuerde que a los jugadores de póquer se les mide por sus ganancias.
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